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Un pequeño estudio preliminar sugiere que la cafeína no solo sirve para despertarse. Cuando se consume unas horas antes de irse a la cama, esta sustancia, conocida como la droga psicoactiva más consumida del mundo, también parece perturbar el reloj interno del cuerpo.
Los autores de la investigación sugieren que esta alteración podría provocar una somnolencia parecida al desfase horario durante las horas del día. Pero la investigación no dice nada sobre cómo el consumo de café en la mañana o durante el día podría afectar al reloj interno del cuerpo, por eso aún hay que confirmar los hallazgos.
Kenneth Wright Jr., profesor del Departamento de Fisiología Integradora de la Universidad de Colorado, en BoulderAún y coautor del estudio, explica que parece probable que tomar café de noche no solo hace que nos mantengamos despiertos, sino que también retrasa el reloj interno, de modo que querramos dormir hasta más tarde.
Lo que se quería estudiar en la investigación era el reloj circadiano del cuerpo, que programa los ritmos biológicos, como el ciclo de sueño y vigilia. Según explicó Wright, cada célula del cuerpo humano tiene un reloj.
El nuevo estudio busca comprender cómo la cafeína podría afectar al reloj corporal. Otras investigaciones han sugerido que la cafeína perturba a los relojes corporales de otros organismos y especies, como las algas, las moscas de la fruta y quizá los ratones, señaló.
Wright y sus colaboradores examinaron a cinco personas a quienes se estudió durante 49 días. Tres horas antes de su hora normal de irse a dormir, se les asignó que consumieran una cápsula de cafeína equivalente a un espresso doble (con la cantidad ajustada según el tamaño corporal) o una cápsula placebo. También se les expuso a una luz brillante o tenue. La luz brillante puede reprogramar el reloj corporal y hacer que las personas se quieran ir a la cama más tarde.
Los investigadores encontraron que la cafeína parecía retrasar los relojes corporales de los participantes del estudio en 40 minutos, más o menos la mitad de lo que se vincula con la exposición a la luz brillante.